¿Cómo son mi padre y mi madre? ¿Para qué son así? ¿Qué me molesta de cómo son y cómo me tratan? … y ahora la gran propuesta… ¿Y YO, qué puedo hacer para que sea distinto?
Dejarse guiar tiene la cosa de la incertidumbre, del confiar, del miedo, de experiencias pasadas no satisfactorias, de “no tener que pensar”…
Guiar tiene la cosa de la responsabilidad por la otra persona, de olvidarte a ratos de empatizar porque es importante “lo que hay que hacer”, de dar por hecho, el despertar de las propias inseguridades…
En este taller de educación emocional ha tocado vivir los dos lados para pensar cómo lo hacemos cada unx y cómo lo hacen nuestros padres y madres. Ver los surcos que tenemos en nuestras relaciones que hacen que siempre hagamos las cosas de la misma manera aunque nadie esté a gusto.
E intentar aceptar que cada unx lo hace LO MEJOR QUE PUEDE Y QUE SABE para luego buscar nuevos caminos fuera de esos surcos y en algunos casos ayudar a nuestros padres y madres a guiarnos aprovechando las herramientas del anterior taller: la Asertividad.
GARAZI DE AYALA BARGUILLA
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